Cómo funcionan los nuevos retrovisores que la DGT quiere que tengas en tu coche
La Dirección General de Tráfico (DGT) ha decidido reemplazar los retrovisores de los vehículos por un dispositivo de alta tecnología repleto de cámaras con el objetivo de evitar accidentes y que los conductores se queden sin visión en los ángulos muertos. Pero ¿cómo funcionan estos nuevos aparatos que tendrás que instalar en tu coche en España?
La tecnología está cada vez más presente en los coches, como los sensores de proximidad y cámaras que ayudan en el proceso de aparcar. Ahora, y para aumentar la seguridad vial, la DGT quiere terminar con los retrovisores para siempre y sustituirlos por espejos digitales. Unos dispositivos que no son nuevos, ya que hay coches que cuentan con este sistema, como modelos de Lexus, Tesla, Honda y Audi.
Cámaras y pantallas
La eliminación de los retrovisores externos por los digitales aumenta el campo de visión del conductor y reduce los ángulos muertos desde los asientos interiores. Unas cámaras que también sirven para ofrecer una mejor vista del tráfico mientras se circula y que se adaptan automáticamente a la iluminación del entorno para que la imagen sea siempre la mejor.
'MAN Optiview' es un dispositivo de alta tecnología que utiliza cámaras exteriores de enfoque y gran angular que se ubican sobre los marcos de la puerta sustituyendo al retrovisor convencional. Unas lentes que sirven para ampliar el campo de visión del conductor por las ventanas laterales y dan una mejor vista cuando se realizan determinadas maniobras, como giros para aparcar.
Las cámaras se pueden plegar, son resistentes al agua y se calientan automáticamente. Además, también filtran los deslumbramientos para ofrecer la mejor imagen posible en las pantallas, aunque haga sol bajo o haya cualquier luz que deslumbre. Este sistema también elimina el retrovisor frontal que se encuentra en el interior del vehículo, sustituyéndolo por una cámara adicional.
En el lado del conductor se encuentra una pantalla de 12 pulgadas con calidad HD y una resolución de 1920 x 1080 píxeles, que puede mostrar líneas auxiliares para valorar mejor la distancia y la longitud del vehículo. Además, es capaz de ajustar el brillo y el contraste de forma automática en función de la iluminación del entorno. Si se quiere hacer de forma manual, en la puerta se ubica un módulo de control.
La pantalla situada en el lado del acompañante tiene un tamaño más grande, de 15 pulgadas, pero mantiene la misma calidad y resolución, el ajuste automático del brillo y contraste, y la posibilidad de mostrar las líneas. El módulo de control de las puertas, que se encuentran en ambas, también permite controlar los cambios de imagen de la pantalla.
Diferentes vistas
'MAN Optiview' puede generar tres vistas de cámaras distintas para cada situación y la pantalla interior cambiará a la adecuada automáticamente en función de la dirección de la marcha, la velocidad y el ángulo de dirección; aunque se puede hacer manualmente desde el control de la puerta.
La primera vista, la estándar, es comparable al campo visual de un retrovisor tradicional. En ella, una línea vertical y otra horizontal dividen la pantalla en cuatro cuadrantes en los que se muestran las imágenes del retrovisor exterior, de gran angular y de bordillo; que se unen de forma digital en una imagen continua para poder ver el área a los lados y detrás del vehículo rápidamente y con seguridad.
La segunda vista es la que tiene zoom, cuyo cuadrante en la pantalla es mayor y permite detectar con antelación objetos que estén lejos, como un vehículo que se aproxime por detrás en el carril contiguo. Una vista que se activa automáticamente cuando se superan los 60 kilómetros por hora de velocidad y que se puede activar manualmente para maniobras de marcha atrás.
Por último, está la vista de gran angular que en pantalla solamente aparecerá para poder ver el entorno del vehículo sin ángulos muertos. Aquí hay dos modos diferentes: la detección automática de ciudad que activa esta visión automáticamente a una velocidad de 45 kilómetros por hora; o la detección de curva automática, que lo hace a 50 km/h si el intermitente está puesto. Por el momento se desconoce cuándo será obligatorio llevar estos retrovisores digitales ni la forma ni precio de instalar uno en tu coche, pero está claro que serán el futuro del sector.