Diferencias entre Avisadores, Detectores e Inhibidores
¿Qué es lo que llamamos un Radar en las carreteras?
Un radar (en el caso de circulación de vehículos en carretera) es un sensor utilizado, principalmente, para medir la velocidad, detectar y localizar objetos por delante de él; en movimiento, o no. Este dispositivo funciona a través de un emisor y receptor; donde el primero genera ondas de radio de alta intensidad y el segundo es el encargado de procesar e interpretar los datos generados, tales como el tiempo o efecto.
Básicamente hay cuatro tipos de técnicas utilizadas para la detección de la velocidad de los vehículos, que son utilizados por las autoridades en la circulación de vehículos en carretera: Se llaman “Cinemómetros"
1) Cinemómetros basados en la técnica de ondas eléctricas con efecto “Doppler”
2) Cinemómetros basados en rayo de luz invisible “Lidar” o “Laser”
3) Cinemómetros basados en circuitos eléctricos en el suelo de la carretera.
4) Cinemómetros basados en la toma de fotografías al paso de vehículos, con cálculo del tiempo entre un punto y otro. (Radar de Tramo)
Realmente, solamente los tipos 1 y 2 son Radares, pero por facilidad llamamos así a todos los equipos que detectan la velocidad de circulación. Únicamente el tipo 1 se puede detectar mediante antena electrónica en los equipos que llamamos “Detector de Radar” Detectar el tipo 2 necesita de otra técnica, más compleja y normalmente ligada con la función de inhibición de sus señales en equipos especiales.
Los tipos 3 y 4 no pueden ser “detectados” con ninguna técnica porque no emiten señal de ningún tipo y únicamente se puede señalizar su situación con las coordenadas geográficas de los mismos. Esto es así, además, porque necesariamente se encuentran instalados en sitios fijos que, además, son públicos y anunciados por los diferentes servicios de Tráfico (DGT, SCT y Trafikoa) + Municipales.
¿Son legales los avisadores y detectores de radar? ¿Qué pasa con los inhibidores?
No todos los medios utilizados en la detección de radares son legales o están homologados. ¿Cuáles son estos medios? ¿Cuál puedes llevar en el coche? ¿Qué diferencias hay entre ellos?
Elementos de detección de radares ¿Cuáles son sus diferencias?
Avisar de donde está situado un radar (Fijo) es totalmente legal, ya que se trata de una información pública que mismamente puede encontrarse en la sección de radares de la web oficial de la Dirección General de Tráfico (DGT). También en el SCT y Trafikoa publican las listas de cada ámbito de influencia.
En cuanto a los radares móviles es distinto; pues las listas disponibles en la web de la DGT, SCT y Trafikoa especifican los tramos de carretera en donde se suelen situar controles de velocidad, pero evidentemente no detalla la ubicación exacta. Por lo que revelar la posición precisa de un control puntual activo de velocidad mediante radar móvil se consideraría ilegal. No así, cualquier área o zona dónde por experiencia personal “suelen situarse en ciertos momentos” dichos controles.
La importante diferencia es pues entre señalar esas zonas “posibles” o bien un punto “cierto, en tiempo real”, de un control que se está llevando a cabo (Avisos mediante RRSS)Al igual que podemos encontrarnos en carretera distintos tipos de radar, también existen diferentes artefactos capaces de avisar, detectar e incluso inutilizar la acción de un cinemómetro. Cada uno cuenta con unas características concretas, pero tienen el mismo objetivo: Evitar ser multados por exceso de velocidad.
Avisador de radar
Es el primero en los equipos contra radar; un componente legal que se encuentra incorporado en la mayoría de dispositivos GPS, pues integra una base de datos pública con la ubicación exacta de los diferentes radares fijos y de tramo la cual se facilita, como hemos mencionado antes, en la propia web de la DGT y otras.
El avisador de radar es totalmente legal y está muy extendido por las Apps de mapeo, así como en asistentes de conducción.
¿Cómo funciona? El avisador nos advertirá de un lugar de un radar Fijo o dónde se conoce que suelen hacer controles temporales de velocidad y marcará su posición a medida que nos vayamos acercando; de esta forma, tendremos tiempo de sobra para ir aminorando la marcha.
Es posible que lleve integrada una función como “Zona con probabilidad de encontrar un radar móvil o camuflado”, algo que sería totalmente legal, ya que no nos revelaría la ubicación exacta en caso de que un control de velocidad se estuviese realizando en ese momento.
Así pues, el avisador informará de la presencia de un radar fijo o un posible radar camuflado, emitiendo una señal acústica y/o visual.
Principal inconveniente: Lo malo del avisador es que en realidad no detectan los radares o controles de velocidad realizados, por lo que deberemos estar atentos y no sobrepasar la velocidad máxima de la vía.
Detector de radar
Este dispositivo ha estado, hasta el momento, sorteando la legalidad de muchas maneras según cada época pasada. Aunque finalmente en 2021 se ha declarado nuevamente que tanto el uso como la tenencia de estos mecanismos, está prohibido y será castigado.
¿Cómo funciona? Los detectores de radares rastrean y localizan la ubicación de cualquier tipo de radar, únicamente del tipo 1, ya sea fijo o móvil, indagando ese espectro electromagnético. Ante la presencia de un radar, el detector avisa al conductor para que disminuya la velocidad. Este dispositivo, a diferencia del siguiente -los inhibidores-, no manipula el funcionamiento de los radares.
Sanción: Actualmente tanto su utilización, como hecho de tener un detector de radar instalado en el vehículo, se considera una infracción grave, por lo que se sancionará con 200 euros de multa y la retirada de 3 puntos del permiso.
Inhibidor de radar
Los inhibidores de radar son artefactos considerados como ilegales, por lo que en la actualidad están prohibidos y son muy perseguidos por las fuerzas de seguridad.
¿Cómo funcionan? Son capaces de detectar la presencia de radares, rastreando el aspecto electromagnético en busca de las ondas características emitidas por los cinemómetros (normalmente de tipo 1 y/o 2). Una vez encuentran y detectan los radares, son capaces de inutilizarlos; permitiendo que el conductor no tenga que reducir la velocidad, pues en ese momento no funcionará ni medirá el exceso de velocidad cometido.
Sanción: Si la Guardia Civil o cualquier cuerpo policial competente, detecta la presencia de este dispositivo en nuestro coche; nos sancionarán con una multa de hasta 6.000€ y la retirada de 6 puntos, aún sin estar utilizando el inhibidor en ese momento. De igual forma, cualquier taller que ejecute la instalación de este dispositivo se enfrentará a 30.000€ de multa.
Información actualizada con fecha 6 de mayo de 2021.